Acabo de terminarme la primera parte, "La de los críticos", de 2666, y no necesito haber releído una página más para saber que es uno de mis libros favoritos, si no MI LIBRO FAVORITO. Es todas las siguientes cosas: una telenovela súper romántica y hasta cursi, con escenas de detener el corazón, tramas paralelas narradas interminentemente hasta el clímax, con la tensión dosificada con maestría; una hermosa metáfora sobre la relación entre la literatura y la vida, o mejor, entre la Literatura y la Vida, entendiendo por Literatura algo que interroga y reverencia una cosa descomunal que hemos convenido en llamar Vida; una visión crítica de los valores post-liberales de la Europa contemporánea, que no deja literalmente títere con cabeza, y que se sirve de la Santa Teresa inabarcable, incomprensible, embriagadora a pesar de su fealdad más allá de exotismos, y muy peligrosa, para decirle a los señoritos barceloneses más de una verdad como un yunque que no duda en soltarles sobre la cabeza.
Todo rodeado de la brumosa presencia de Archimboldi, un símbolo con potencial de clásico, que es como un rastro difícil de precisar pero resulta que cuando menos nos dimos cuenta se había instalado en nosotros, transformándonos y transformando todo lo que nos rodea.
¡Qué libro tan hijueputa! Hasta tiene la palabra "Efectiviwonder".
(La foto es de un montaje para teatro que hizo un grupo de Barcelona hace unos años. No lo vi, pero me dijeron que era muy bueno. Y claro, es que la novela ya es como una hijuemadre ópera.)
2 comentarios:
Yo pude terminar el libro, aunque saltándome unas cuantas paginas de la parte de o crímenes, que me parece demasiado repetitiva y monótona. El resto de la novela es genial, pura literatura maestra, que convierten a esta en mi obra favorita.
Claro, hay que saltarse una que otra paginita..... :D
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